A menos de 72 horas de haberse consumado la fuga de “El Gordo”, cuando las autoridades y algunos empleados del Instituto Roca declaraban en la Justicia por este hecho, otro menor se evadía del establecimiento en el que se encuentran alojados los adolescentes que están en conflicto con la Ley. La fiscala María del Carmen Reuter, que investiga el hecho, ordenó la aprehensión de dos empleados que habrían cometido negligencias.

“Titi”, de 17 años, con varias causas por robo agravado, se escapó después por un hueco que dejó al romper una luminaria del muro de contención del predio. El prófugo, según confirmaron fuentes judiciales y policiales, ya se había escapado en varias oportunidades de ese lugar.

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Personal de Delitos contra las Personas, al mando de los comisario Marcelo Salla y Ricardo Villagra, descubrieron varios indicios en contra de los dos empleados que tenían a su cargo el cuidado del adolescente. Uno de ellos, de acuerdo al expediente, no habría estado en su puesto de trabajo. Al otro, siempre según el expediente, le habrían avisado que “”Titi” estaba realizando daño en las instalaciones, pero nunca fue a ver qué estaba sucediendo.

La fiscala, que también está investigando al personal para determinar si “El Gordo” gozaba de algunos privilegios, ordenó la aprehensión de ambos empleados. Luego de que declaren, definirá sus situaciones procesales.

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Por otra parte, los empleados del establecimiento, iniciaron anoche un plan de lucha en la puerta del Roca. Reclamaron de esta manera por la detención de sus compañeros. Las consideraron, según trascendió, injustas porque su función no es la de custodiar a los menores que se encuentran alojados allí. Dijeron que esa es una responsabilidad de la Policía.